El Boquetillo, un museo de arte urbano al aire libre
Un mensaje poético y onírico donde el texto y el dibujo forman una obra dedicada al mar como metáfora de las luchas internas.
Esta intervención ha supuesto un antes y un después para mí. Pintar un mural de este tipo en un espacio público y rodeado de artistas nacionales e internacionales era algo que pensaba que no podía ocurrir en mi propia ciudad.
Desde el Ayuntamiento de Fuengirola me comunicaron algunos puntos importantes a tener en cuenta para el desarrollo del mural, por eso tanto el mío como muchos de los murales presentes allí tienen al mar como elemento principal. El Boquetillo es un barrio con una fuerte tradición pesquera, y por eso aproveché para utilizar este elemento como un símbolo en la lucha personal e interna de cada individuo.
El texto reza: Yo, en las profundidades, buceo rodeado de tiburones. Entiendo la ola que me amenaza. Es una sombra en el abismo que, a medida que desciendo, permite a mis ojos dilucidar lo que esconde y oculta el misterio de un lugar que inspira terror a lo desconocido, allí donde ningún barco quiere navegar más allá de la línea del horizonte. Un mar en tus ojos lleno de tempestades capaces de hundirte y quizás no alcancen puerto de nuevo y mueran los sueños. Merecerá la pena mientras se olviden las dudas, enterradas junto al tesoro. Bailando con las olas en el mar hasta la isla del destino.
